Viernes, 24 de junio 2022

Desmontar estructura criminal

Un tema que genera indignación nacional es la nacionalización de Ebal Díaz y Roberto Cardona y sus familias como nicaragüenses, pero se anuncia que la puerta está abierta para otros 44 funcionarios de la narco dictadura. Una acción que busca impunidad ante la abundante evidencia de los actos de corrupción cometidos en la última década. Esta acción deja varias lecciones, destacamos las principales.

Primera lección. Tenemos que tomar conciencia que el problema de los gobiernos centroamericanos no es si es de izquierda o derecha, el problema fundamental es la utilización del estado para enriquecerse y asegurarse impunidad. Está fresco en la memoria cuando Ebal Díaz comentó en un foro televisivo, “jamás vamos a permitir que este país caiga en las garras del comunismo, no queremos en Honduras una nueva Cuba, una nueva Venezuela, ni mucho menos una Nicaragua”. Hoy goza la capa protectora de Ortega y Rosario.

Segunda lección. Reafirma que estuvimos gobernados por una banda de criminales, que sabían el daño que hacían al país y se anticiparon a buscar impunidad dentro y fuera del país. Esa banda de crimínales actuaron con la protección de las autoridades del Ministerio Público y de la Corte Suprema de Justicia.

Tercera lección. Reafirma que la principal tarea del nuevo gobierno es desmontar esas estructuras criminales tanto las que operan desde adentro, como las que operan afuera del Estado. Y aquí dejamos la pregunta ¿está haciendo el Congreso Nacional todo lo necesario para desmontar esas estructuras criminales? ¿Le exigirá doña Xiomara a Daniel Ortega la entrega de esos criminales? ¿estamos creando las condiciones necesarias para instalar una CICIH con la suficiente fuerza para combatir las actuales estructuras criminales?

Cuarta lección. La actual atmósfera de impunidad reafirma la necesidad de elegir nuevas autoridades en la Fiscalía y de la Corte Suprema de Justicia, y deducir toda la responsabilidad penal sobre las actuales autoridades, y sentar precedente para que estos hechos no se repitan. Estimados congresistas, es sus manos está la tarea, no pierdan tiempo que están muy bien pagados.