Lunes, 18 de julio 2022

La corrupción como enfermedad de base de la sociedad hondureña

La corrupción como enfermedad social tiene múltiples raíces, dinámicas de funcionamiento y maneras de expresarse en el cuerpo humano llamada Honduras.

La corrupción como hecho histórico y como acción cultural ha logrado permear en las diversas instituciones de la sociedad, sean estas de carácter público o privado. Estas dinámicas se han normalizado, aceptado y promovido, se puede analizar con las frases que popularmente escuchamos “si están en el poder y no roban son tontos” o “robó, pero hizo algo”.

La corrupción ha pasado a ser uno de los principales problemas que enfrenta y vive en la cotidianidad la sociedad hondureña. Y se traduce en la percepción de la ciudadanía al identificarlo como uno de los principales problemas del país y este a su vez, como demanda al nuevo gobierno de Xiomara Castro, según datos recientes del Sondeo de Opinión Pública del ERIC-SJ.

Los principales casos corrupción y el desfalco del dinero del presupuesto público han impactado directamente en los derechos fundamentales de la sociedad hondureña. Por ejemplo, el caso de hospitales móviles en el derecho a la salud, o el caso Pandora que impacta directamente en los grupos campesinos y el derecho a la producción de granos básicos.

La cooptación y el control de grupos de criminalidad en las instituciones encargadas en impartir justicia, nos recuerda la fragilidad para que el Estado de Honduras pueda desde su propia institucionalidad desmontar las redes y la práctica de corrupción en el Estado.

Algunos medicamentos para empezar a tratar la corrupción como enfermedad de base y salir de la unidad de cuidado intenso puede ser; 1) cultura de vigilancia, participación y movilización de la ciudadanía ante las acciones de las instituciones estatales y privadas. 2) Demandar transparencia en el proceso de la elección de la nueva corte suprema de Justicia y fiscal general. 3) Acompañamiento internacional desde la instalación de una Comisión internacional contra la corrupción e impunidad, en sintonía con las propuestas y demandas de población.