La directora de Litigio e Incidencia Internacional de la organización Robert F. Kennedy Human Rights, Angelita Baeyens, comentó que “no hay excusa” para que el juicio contra Jhony Andrés Salgado no sea transmito de forma virtual.

A inicio de semana, las organizaciones internacionales defensoras de derechos humanos Robert F. Kennedy Human Rights (RFKHR), Women’s Link Worldwide (WLW) y Odhikar solicitaron al presidente de la Corte Suprema de Justicia, Rolando Argueta, la transmisión virtual del juicio contra Jhony Salado, víctima de la crisis post electoral del 2017, para garantizar una observación pública y calificada del proceso.

“Esperamos que el Tribunal nos conteste lo más pronto posible porque consideramos que es crítico que acepte la virtualidad, además, hoy en día no hay excusa para que no sea así, creo que si algo nos ha enseñado la pandemia es que, en todos los aspectos, incluso, y sobre todo cuando se trata de audiencias y de juicios orales la virtualidad permite mayor acceso”, declaró Angelita Baeyens, en una entrevista a Radio Progreso.

Baeyens señaló que el caso de Johny Salgado es “muy crítico” y simbólico de una problemática de criminalización de la protesta social, de persecución en contra de personas que han participado en protestas.

Añadió que “al solicitar que el juicio se haga de manera virtual puede haber un mayor escrutinio público, se pueden dar mayores garantías del debido proceso en este caso en favor de Jhony, que ha sido víctima de criminalización.

La solicitud de transmisión virtual del juicio contra Jhony Salgado, además, fue enviada a Marianela Zúniga Sánchez, presidenta del Tribunal de Sentencia El Progreso, Yoro.

En ese sentido, Angelita Baeyens, representante de la organización Robert F. Kennedy Human Rights, dijo que todavía no han recibido “ninguna respuesta” y agregó que “realmente se trata de una cuestión de pura voluntad, en este caso de las autoridades judiciales de permitir que haya acceso al juicio”.

Finalizó interpretando que el proceso contra Jhony Salgado nunca debió comenzar porque se le presentaron cargos en su contra injustamente: “el hecho que todavía continúe –el proceso- marca una señal muy preocupante de una persecución que no solo se da por instrucciones del Ejecutivo, sino que también el sistema judicial puede estar sirviendo de alguna manera de cómplice, incluso sin quererlo, de permitir que procesos espurios como el Jhony Salgado continúen y se prolonguen en el tiempo”.

El 21 de diciembre de 2017, Jhony Andrés Salgado Fuentes fue capturado por agentes de la Policía Nacional Preventiva en su casa de habitación en la ciudad de El Progreso, departamento de Yoro. Ese día, las fuerzas de seguridad realizaron un desalojo violento de la protesta ciudadana en contra del fraude electoral en el puente de Quebrada Seca, a varios metros de su casa.

A raíz de esa detención se abrió un proceso penal contra Jhony, por suponerlo responsable de los delitos de Portación ilegal de arma comercial, en perjuicio de la seguridad interior del Estado de Honduras; y uso de indumentaria policial, en perjuicio de la Policía Nacional de Honduras.