En estas vísperas del bicentenario de opresiones y racismos, la vergüenza hondureña de narco dictadura es mundial, la corrupción se convirtió en sistema operativo de una institucionalidad de los fuertes e impunes, y experimentamos el mayor deterioro ambiental de la historia. Pero también llegamos con propuestas que recogen los sueños del pueblo y con una palabra firme ante los criminales que ensucian la patria que ha de ser por toda su gente compartida. Y con el amor de siempre lo expresamos en este Vigésimo séptimo manifiesto público:
1.- Condenamos la brutal represión a la tradicional movilización del 15 de septiembre en Tegucigalpa, la brutalidad en los ojos del artista Cristian Esteban Espinoza y en los cuerpos atropellados de dos defensores de derechos humanos, no son hechos aislados es parte de la estrategia para sembrar terror en la ciudadanía, quienes han convertido los cuerpos armados del Estado en mercenarios para reprimir y desaparecer.
2.- Denunciamos al mundo que hay una decisión política de Juan Orlando Hernández y Lenir Pérez de mantener preso a 8 defensores del río Guapinol y de abrir un nuevo juicio a cinco defensores que ya tenían sobreseimiento, una acción que atenta contra toda norma jurídica y amenaza la vida de los compañeros. Exigimos la liberta inmediata para todos, su único delito es defender agua.
3.- Creemos en los procesos electorales, y en la lucha ciudadana por recuperar pacíficamente y a través de la participación electoral un Estado, ahora en manos de criminales. Sin embargo, advertimos del peligro que el actual proceso eleccionario profundice todavía más la crisis, porque la dictadura dio un día un golpe de Estado para controlar un poder que no está dispuesta a dejárselo arrebatar por la vía del voto.
4.- Saludamos la lucha emprendida por nuestros hermanos migrantes Tpsianos quienes buscan ampliar sus permisos de trabajo y permanencia en los Estados Unidos, al tiempo condenamos el desprecio de las autoridades consulares con los Tpesianos, ellos sostienen la precaria gobernabilidad y sus remesas representan una cuarta parte del Producto Interno Bruto.
5.- Alertamos que la crisis del Coronavirus ha sido la tormenta perfecta para las familias, aumentó la pobreza, desnudó la crisis alimentaria, así como el deterioro ambiental, producto de los proyectos extractivos y la agroindustria. Así mismo se continúan con los procesos de criminalización con los defensores de los bienes naturales. Exigimos libertad para los presos políticos de Guapinol y el aparecimiento de nuestros hermanos garífunas.
6.- Saludamos a todas las organizaciones y plataformas sociales que se movilizan en la calle, desafiando la represión y miedo inducido, y respetando todas las medidas de bioseguridad. Llamamos a todas las organizaciones sociales, gremiales, comunitarias, étnicas, profesionales y populares, a que sostengamos la unidad haciendo acopio de nuestra potencial creatividad en las luchas.
Honduras, septiembre de 2020
